Los más pequeños del cole celebran este día a su manera, y como es lo propio de estas edades tienen que hacerlo experimentando, le ha tocado el turno al tomate, el color rojo que simboliza el amor. Se lo han pasado en grande y han disfrutado al máximo. Algunos han acabado más limpios que otros pero todos con una sonrisa en la boca. ¡Feliz día pequeñajos!